Historia del despacho Vallaure abogados


En noviembre de 1959 me di de alta en el CAO y me asignaron el número 743 de Colegiado.

Comencé el ejercicio de mi profesión, tras dos años de pasantía, en el año 1.962, en el edificio nº 2 de la calle San Francisco de Oviedo, frente a la entrada principal del Edificio histórico de la Universidad de Oviedo, en dónde se ubica el Rectorado.Por aquellas fechas lo hice solo. Poco tiempo más tarde, comencé a tener compañero de despacho en funciones de pasantía. La bendita y esforzada profesión, me cautivó; hoy puedo afirmar que comencé a hacer un servicio a la sociedad que me satisfacía plenamente. Con ella pude atender con la misma ilusión a pobres y a ricos. Me decían que si alguien, sin medios económicos, necesitaba a un Abogado, podía acudir a mi despacho, porque sería atendido.

pablo-vallaure-padreLos más de diecisiete abogados que compartieron días conmigo, estudiando los asuntos que llegaban al despacho, se identificaron plenamente con el espíritu que me hizo feliz en el ejercicio de ésta, mi profesión, tan excelsa y gratificante como puede ser la del médico o del sacerdote. Estos fueron los casos de Juan Luis Cabal, José Vicente Gardón, Juan Rico, Félix Camporro y, por supuesto, mi sobrino Armando Orejas.

En mi dilatada actividad profesional hube de atender a la liquidación una de las empresas con mayor plantilla de trabajadores de aquellos tiempos. Y otra, con el mejor equipo de técnicos, ambas relacionadas con la construcción civil en general y la promoción de Viviendas en Oviedo. Ello me supuso una experiencia que no fue, precisamente, de las que dejan buen sabor de boca a un Abogado, pero traté de implantar el criterio de la objetividad y respeto a los implicados.

Pronto me di cuenta de que tenía que aumentar mi oferta profesional. Y así de los tres profesionales que formaban el Bufete en los primeros años, pasamos a ser cinco abogados, distribuyéndonos los trabajos de carácter civil, mercantil, laboral, penal, eclesiástico y fiscal.

Acudíamos a las jurisdicciones civil (matrimonial y mediación), contencioso administrativa (administrativo, económico administrativo), social y penal.

Desde los inicios a nuestros días.


En el año 1990 se incorpora al despacho mi hija María José y en el año 1991 también mi hijo Pablo, a los que he querido transmitir mi forma de trabajar, mi experiencia profesional y los conocimientos de tantos años. Ellos son los que hoy dan continuidad al despacho, junto con un equipo de otros tres profesionales, Ana Álvarez, Saúl y Ana Fernández. He podido trabajar con ellos durante los últimos años de mi ejercicio profesional. No quiero olvidar a María, que durante los últimos años ha sido secretaria del despacho y pieza esencial en el funcionamiento del mismo. Ha contribuido a dar continuidad a un despacho que lleva ya tantos años trabajando al servicio de sus clientes (también buenos amigos).

En la actualidad el despacho tiene una amplia presencia en las antes citadas jurisdicciones y además, ofrecemos a nuestros clientes la posibilidad de resolver sus conflictos y controversias a través de la mediación. Una alternativa que siempre hemos apoyado desde nuestro despacho y que estos últimos años estamos en condiciones de ofrecer a nuestro clientes con profesionalidad. Esto es gracias a la formación recibida por los miembros del despacho y al impulso que ha supuesto para este procedimiento de resolución de conflictos, la aprobación de la Ley de Mediación Civil y Mercantil.

Nuestro trabajo es el de unos profesionales volcados en el buen hacer y especial atención a todos nuestros clientes, defendiendo sus derechos y protegiendo sus intereses.


Fdo. Pablo García Vallaure
Fundador de Vallaure Abogados